“Para mí, es muy bueno saber que en la Eucaristía está Dios presente entre nosotros, que no se esconde, que es verdadero, real y actual. Es saber que me siento hijo de Dios y coheredero de su Reino, y me siento bendecido que Dios se haya fijado en mí”.
-Antonio Da Silva, Catedral del Sacratísimo Corazón de Jesús, Knoxville
"Para mí, la Eucaristía es tener una cita con Dios, nuestro Señor. Al llegar el día de asistir a la Santa Misa o hacer una visita al Santísimo me lleno de preguntas. ¿Será que me preparé lo suficiente para estar frente a Ti? ¿Será que me di el tiempo para poder hablar de corazón a corazón contigo? ¿de que mis pensamientos se pierdan con los tuyos y poder hacer tu voluntad? Cada vez que tengo un encuentro con el Señor es como si fuera la primera vez. El l nerviosismo, los deseos de verlo, de atenderlo como se merece, sentimientos que veces son difíciles de describir, pero muy bellos, que te hacen reír y llorar a la vez y el corazón gusta de Él y de su presencia viva".
-Arcelia Camacho, Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, Chattanooga
“Para mí, Cristo vive en la Eucaristía para siempre y está presente con toda su persona y su vida, su misterio y todo su amor redentor, en el Pan y en el Vino. Es el Hijo de Dios venido en carne, luz, camino, verdad, vida, reconciliación, paz, salvación para todos; alivio y descanso para quien acude a Él. Todo esto es para mí la Eucaristía”.
-Alejandro Samano, parroquia de Todos los Santos, Knoxville
“Para mí, es ese encuentro personal y místico con Cristo el cual se da porque me ama, y se hace uno conmigo en Cuerpo, Sangre y Divinidad, dándome su perdón y su gracia divina”.
-Diácono Erasmo Hernández, parroquia Santa María, Athens
"Para mí, la Eucaristía es la fuente verdadera de vida, pues nuestro Dios invisible se hace visible para nosotros. Es el centro de mi Fe, es mi fortaleza, es mi sostén, es quien me levanta, quien me anima, quien me reanima, y lo es todo, es Jesús mismo, vivo y real. Son varios los testimonios en mi vida al tener esa unión con Él. Es el regalo más grande de Dios Padre hacia sus hijos. Dios mismo en medio de su Pueblo, Su Iglesia".
-Gerardo Aguilar, parroquia Santo Tomas Apóstol, Lenoir City y miembro de la Renovación Carismática Católica de la Diócesis de Knoxville